El peeling por ultrasonido, es una exfoliación, que estimula el colágeno, ayudando a que la piel recupere su elasticidad, firmeza y flexibilidad.
El peeling ultrasónico no es doloroso y no causa inflamación o enrojecimiento en la zona tratada. Los resultados se empiezan a notar inmediatamente. Al ser un tratamiento de ultrasonidos, no es recomendable su tratamiento en mujeres embarazadas, personas con infecciones en la piel o con heridas recientes.
Además de permitir la limpieza y regeneración profunda de la piel, el peeling ultrasónico consigue un rejuvenecimiento facial, atenúa las líneas de expresión y disminuye el oscurecimiento de las manchas. Es efectivo por tanto para mejorar un cutis con leves arrugas, cicatrices de acné, poros dilatados, puntos negros o manchas cutáneas. También prepara los poros abriéndolos para una mejor penetración de cosméticos.
Técnica
Se realiza a través de ondas mecánicas con frecuencias de entre 200 a 400 kHz y actúa mediante vibración sin aplicación alguna de vapor sobre la piel. Su efecto produce una repolarización de la membrana celular y una profunda hipertermia localizada que estimulan los procesos metabólicos que ayudan a la producción de colágeno y elastina activando los fibroblastos. De esta forma revitaliza las células de la piel. Además, su acción se desarrolla desde la epidermis hasta el periostio, que es la membrana que recubre el hueso, consiguiendo un efecto revitalizador en los tejidos que se encuentran en la zona tratada.